Parroquia "Divino Niño Jesús"


La Parroquia “Divino Niño Jesús” responde a una necesidad de la ciudad de Mariara. Debido a que la ciudad pasó vertiginosamente de 50 mil personas en los años ‘70 a más de 200 mil personas en los años ‘90, la Congregación SCJ y el obispo de ese entonces, Mons. Jorge Urosa Savino, acordaron la creación de una nueva parroquia mediante la división de la parroquia original “ Ntra. Sra. del Carmen”. Mediante decreto de creación, se procedió a la erección de la nueva parroquia ubicada en la urbanización de “Aguas Calientes” y llevaría por nombre “Divino Niño Jesús”.
Así que para el año 1994 se traslada desde Caracas el P. Antonio González, scj para Mariara a formar parte de la comunidad y para ser nombrado párroco de dicha parroquia. Se consigue una pequeña capilla que ya anteriormente había atendido el P. Juan Rodríguez, scj cuando estaba trabajando en Mariara.
De igual forma que otras obras, no se pensaba en la remodelación – que a la postres es más caro – sino en la construcción de la nueva iglesia. Se analizaron los planos y los terrenos y se vio la posibilidad de construir en dirección este, pero los terrenos y propiedades aledañas no dejaron y se optó por la construcción mirando al sur. Se derribó la antigua capilla y se empezó la construcción de una pequeña iglesia de una sola nave sin columnas de por medio. Llegada la construcción se hizo una iglesia de aproximadamente sesenta metros de largo por unos veinticinco de ancho. Se conservaron las formas de las ventanas al estilo colonial con un pequeño saliente de adorno y el techo de machihembrado y tejas.

Por fuera está rodeada de pequeños jardines más una plaza o atrio que recibe a los fieles; por dentro, no reviste mayor obra de arte pero el altar mayor está muy bien conservado y ricamente cuidado por cortinas para lo que es el altar dedicado al Santísimo Sacramento del altar. Hablando del altar, éste es pequeño pero acogedor para al ambón de la Palabra, el altar y un pequeño presbiterio colocado delante del altar. Detrás de este se encuentra la sacristía y el pequeño despacho parroquial para recepción de todos.
Desde el año 1994, la atención a los fieles de la parroquia ha sido más constante. Anteriormente se tenían visitas de los “misioneros” que venían desde el centro de Mariara para la celebración de los sacramentos y en especial, de la Eucaristía.
El primer y único párroco hasta ahora, inició el proceso de mayor estabilidad en la celebración de los sacramentos, atención de la catequesis de primera comunión y de confirmación; se preocupa de la atención de los enfermos de la comunidad y sobre todo, el aspecto social que tanta falta hace en cualquier lugar donde las acciones del gobierno no llegan.
Aún en la soledad – puesto que el personal es escaso -, el P. Antonio González forma parte de la gran actividad pastoral de los Sacerdotes del Sagrado Corazón de Jesús. Sus hermanos están por la labor de la ayuda que en definitiva no es otra cosa que la participación en la Construcción del Reino de Dios en las almas y en los corazones de tantos hombres que desconocen a Jesús, el Señor.